Me
regocijo en la fortuna de que al no verlos intentaré miradas personalizadas sin
saber en quién recaeré. Fijáte cómo controlo el tono de voz: me gustaría estar
moviéndome por todos lados, volverme insana en el proceso. Significación inútil
en “la timidez”, la despreocupación por el otro es una mentira. La luz está
sobre ellos. Atenuándome cada vez más, me convierto en una gris estatua de porcelana
femenina que me embelesó en el cementerio de la Recoleta, y ahora soy yo, ésa
soy siempre yo. Me gusta. Pero, ellos necesitan una prostituta que les
haga algo. Que la poesía sea sinónimo de rock-star, y no de “aburrimiento”,
“clásico”, y que sea “accesible” pero no “fácil”, etc. Ser “directa” y “dura”,
“lánguida”, “suicida” y renacer, “heroína”, “nadie”, “clandestina”, también
“cómica” e “irónica”, y todo lo que vos quieras, puta.
Qué-encanto-me-encanto, deslizándome como si poseyera
cierto conocimiento, sintiendo cierta aptitud freak enorgullecedora, les bailo
en el palo. Estudiante universitaria y bailarina de night-club. Por dioz,
qué zensación. Ellos, ¿qué espectan?
¿Quiénes? ¿Quién soy? ¿Quién creo que soy para los demás? ¿Qué es lo que
supuestamente me gusta?
Una
vez que comienzo puedo seguir horas. Bailar mesa por mesa, con los ojos cerrados,
mi mente a mil kilómetros de ese lugar.
La
base de mí puede estar en el descreimiento, lo que significa que presiento que
las personas somos individuos “forjados” para vivir en comunidad, que “esto” no
es natural, que existe el aglutinamiento en las convenciones sociales.
Sí, nos pegamos.
Quiero
despertarte a través de mí, vos. Estoy aprendiéndome muy enamoradiza. De ojos,
miradas en todas las instancias, observar gesto, respiración, lenguajes.
Subliminal rescatarte de la coraza que en mí pienso infligir en cada instante.
Salvémonos del engaño. ¡Inventemos una nueva palabra para designar los lugares
comunes! (qué vicio el de la creación). Si tan sólo ya y aquí mismo
descubrieran que todas las palabras buscan el silencio…
La
diferenciación es fundamental. Dirán que la trasmutación en un ser ascético es
de por sí estúpida ─extrema; aunque puede ser un buen
primer paso: lavarse de la cotidianeidad impuesta: transportación. Viajamos
livianos. Sonidos de placenta, de globos. Puñito cerrado. Mamá no me dejaría olvidar
al resto. Vamos, animémonos a llegar al ser. Como si no valiéramos, tememos
tomar la libertad, necesitamos inconscientemente un régimen, la opresión
a-dios.
Ya se acabó
la música (me puedo ir)
(debo bajar)
Me pongo la ropa…
Me presento…
otra
*Va con Flashdance / What a feeling...!